¡Más!
Las puertas acababan de cerrarse y Tony y su colega ya estaban moviendo las caderas. La canción aún no había terminado, así que con la música de Silentó sonando de fondo, los dos se divirtieron muchísimo.
Celebraron la vida a puerta cerrada, camino del retiro de Tony. Aun así, esto no era todo. Estaban a punto de ser atrapados por su jefe, quien reaccionaría de manera muy peculiar a su baile.
Pero primero el ascensor hizo una parada más…