La alcantarilla
La alcantarilla que Miguel había encontrado estaba fuera de uso. Estaba completamente seca y se parecía un poco a un refugio antibombas. La «puerta de entrada» era una tapa de alcantarilla. El interior no era muy grande, pero parecía que podría albergar a dos personas si realmente querían que funcionara.
Su futuro había comenzado. La convertirían en algo increíble.