Pasado por alto
Cuando Margaret hizo la pregunta, volvió a mirar bien al chico. Era una mañana fresca y el rocío aún cubría la hierba alrededor de la parada de autobús. No había mucho que notar sobre la ropa del chico, pero cuando sus ojos se desviaron más hacia abajo, se dio cuenta de que se estaba perdiendo algo.
Estos detalles fueron muy alarmantes para Margaret.