Una mentira
Shelia y Rachel se aislaron cada vez más del resto de sus amigos. La policía también continuó interrogándolos. A la larga, los detectives se enteraron de que el automóvil que se había visto en las imágenes de CCTV pertenecía a Shelia. La investigación adicional reveló que el automóvil había estado a la venta desde la mañana de la desaparición en la ciudad de Blackstone, que se encuentra al oeste de la residencia de las niñas.
Le habían dicho a la policía que habían conducido hacia el este esa noche. Esto resultó ser una mentira. No podrían haber dejado a Skylar si hubieran dejado el coche en Blackstone. La historia empezó a resonar por todos lados. Al final resultó que, las chicas tenían motivos para mentir…