Método
Lo primero que haremos será dividir todos los tomates en cuartos.
Licúalos todos con una batidora de inmersión manual o un procesador de alimentos. Mezcla la levadura antes de agregarla a un tazón.
Añade la harina y mezcla con una espátula o con las manos. Mezcla hasta que puedas formar una bola. Colócalo en el bol y deja reposar durante 15 minutos.
Cúbrelo y déjalo intacto.
Después de 15 minutos, toma la bola de masa y amasa durante un minuto. Déjalo reposar por otros 30 minutos.
Después de media hora, retira la masa y colócala en tu área de trabajo. Siempre es mejor trabajar sobre una encimera de granito, acero inoxidable o una tabla de cortar grande de madera.
Espolvorea harina sobre la superficie de trabajo y usa un rodillo para estirar la masa. Extiéndelo en un rectángulo muy delgado.
Pica las cebolletas y mézclalas con el queso crema. Divide esta mezcla de queso crema + cebolla tierna sobre la masa de tomate. Asegúrate de que la mezcla se distribuya uniformemente.
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