Eliminando desechos de cascadas
Con la esperanza de solucionar el problema, las autoridades estadounidenses y canadienses recurrieron a la Comisión Conjunta Internacional (IJC), una organización que supervisa las regulaciones relacionadas con las aguas compartidas. Pero mientras los expertos estaban ocupados buscando una solución, se lanzó una operación temporal para eliminar todos los desechos de las aguas sobre las cataratas.
Para lograr esto, primero fue necesario desviar el flujo de agua sobre las Cataratas Americanas. Y así, el 13 de noviembre de 1966, se llevó a cabo un ingenioso plan. Aguas arriba, la Represa Internacional de Control de Agua se puso a toda marcha. Las compuertas se abrieron de par en par para permitir la entrada de flujo. Al mismo tiempo, las centrales hidroeléctricas también se incrementaron hasta completar su capacidad.