El principio
Después de unas semanas hablando por teléfono, John se atrevió e invitó a Chloe a cenar. Ya había superado a Heather y sus ojos estaban puestos en la hermosa modelo que lo había consolado en la exhibición de coches. Ella le dijo que sí.
La llevó a uno de los restaurantes más lujosos de la ciudad, donde hablaron y rieron hasta altas horas de la noche con una carísima botella de vino. Luego, tomaron un taxi hasta el departamento de John, donde continuaron su velada.
Una cita se convirtió en dos, dos se convirtieron en más. Chloe, a diferencia de la ex de John, parecía digna de confianza.