Un movimiento audaz
Nancy miró el extraño anillo en sus manos. Nunca lo había visto antes y se sentía frío al tacto. Se estremeció al pensar cómo lo consiguió. Odiaba el hecho de haber robado el anillo del cuerpo de su abuelo mientras él yacía en su ataúd, en paz. No estaba orgullosa de lo que había hecho, pero como este anillo nunca antes había estado en la mano de su abuelo, sintió que era una especie de señal. Entonces ella lo tomó.
Lentamente, giró el anillo en sus manos. Lo sostuvo contra la luz solo para ver si podía encontrar algún tipo de pista. Lo que vio a continuación, casi la hizo soltar el anillo.