El veterinario llegó en pocos minutos, acababa de terminar una tarea cerca. Paul estaba muy contento de verlo, porque eso significaba que podrían salvar al serpiente. El veterinario echó un vistazo al serpiente e inmediatamente supo que algo andaba muy mal. Sedaron al gordo animal y lo llevaron al hospital más cercano.
Esperaban poder salvar al serpiente…