Cumplimiento de la ley
Esa noche los vecinos de David llamaron a la policía. No porque de repente les hubiera crecido un dedo o una pierna extra debido a la radiación, sino porque pensaron que su vecino se estaba comportando de manera muy sospechosa. Estaba ocupado con un coche y en la oscuridad era difícil ver exactamente lo que estaba pasando.
Cuando la policía llegó al lugar, resultó que el informe había sido incorrecto. El oficial esperaba encontrar a un niño que estaba tratando de robar un vehículo. Pero no, el coche resultó ser el del chico. No es que no estuviera pasando nada loco, porque el chico en cuestión estaba ocupado cargando algo muy extraño en su baúl.
¿Qué estaba manejando? Un reactor nuclear.