El centro neurálgico de la nutrición
Una sola taza de espinacas crudas contiene vitaminas y minerales esenciales. Tiene pocas calorías pero mucha vitamina C, hierro, magnesio y potasio. Por no hablar de que es una gran fuente vegetal de hierro, crucial para el transporte de oxígeno en el cuerpo, y de magnesio, necesario para el metabolismo energético y el mantenimiento de la función muscular y nerviosa.
Las espinacas son un superhéroe cuando se trata de controlar la diabetes. Contienen ácido alfa-lipoico, un antioxidante que reduce los niveles de glucosa, aumenta la sensibilidad a la insulina y previene los cambios inducidos por el estrés oxidativo. Incorporar las espinacas a sus comidas puede cambiar su forma de controlar la diabetes.