Un camionero se venga de la mujer adinerada que le bloqueó la carretera

Con una pequeña linterna, David salió de su coche, que estaba aparcado al otro lado de la calle, y se acercó a la entrada de la casa de la mujer. En el camino de entrada había un buzón con varias personas registradas en la dirección. Basándose en los apellidos, David supuso que la mujer probablemente dependía de la riqueza de sus padres y no había conseguido nada por sí misma. Esto era ideal para su plan, ya que significaba que seguía dependiendo de otros.

David anotó rápidamente los nombres del buzón en su cuaderno y regresó en silencio a su coche antes de que nadie pudiera verle. Para entonces, ya estaba amaneciendo y las posibilidades de que lo descubrieran eran considerables. Condujo de vuelta a su hotel, dispuesto a pasar a la siguiente fase de su plan.