Los okupas ocupan la Casa del Soldado y aprenden una costosa lección

Vernon agradeció la distracción y le contó a Jake su terrible experiencia. Detalló la invasión de su casa, el falso contrato de alquiler y la lentitud del sistema judicial. Jake escuchó atentamente, moviendo la cabeza con incredulidad.

Jake, que ahora formaba parte de una banda local de motoristas, se inclinó hacia él. «Sabes, Vernon, a veces el sistema judicial no es suficiente. Si quieres echar a esos okupas, quizá una demostración de fuerza podría servir»