La boda perfecta de una pareja da un giro inesperado: vea la foto que está rompiendo Internet

«Claro», contestó él, mientras sus dedos golpeaban nerviosamente el portátil que llevaba en la mano. Lo dejó sobre una mesa cercana, mientras su mente se debatía con el lenguaje de la revelación. ¿Cómo decirle a alguien que su cuento de hadas podría tener una subtrama más oscura?

Cada segundo que pasaba era una gota en el océano de la eternidad y, sin embargo, esos instantes se sentían increíblemente apremiantes, como si el propio tiempo contuviera la respiración, esperando sus palabras. Abrió el portátil, pero antes de que pudiera girarlo hacia ella, miró a Anna a los ojos. Parecía ansiosa e incluso un poco preocupada, como si realmente quisiera entender lo que estaba pasando.