Un chimpancé irrumpe en el hospital: una enfermera llora al ver lo que lleva en brazos

Se dio cuenta de que no estaban solos. El chimpancé que había irrumpido en el hospital, causando caos y confusión, formaba parte de un misterio mayor, uno que yacía oculto bajo la tierra en este pozo olvidado. Mientras la luz de David bailaba sobre las formas que se movían debajo, la llamó: «¡Son las mismas criaturas, Jessie!»

Las pequeñas criaturas se movían en las sombras, sus ojos reflejaban la luz y creaban un brillo espeluznante. El sonido de sus movimientos, un suave susurro, llenaba el silencio, haciendo la escena aún más inquietante. David prosiguió con voz preocupada: «¿Recuerdas el que contaste en el hospital? Estaba herido, ¿verdad? Viendo a estos de aquí, puede que también tengan problemas. Tal vez se cayeron y no pueden salir. No podemos dejarlos aquí»