Tras aquel aterrador último comentario, se marcharon, llevándose consigo al extraño ser. Bill se quedó dándole vueltas a las desconcertantes pistas. ¿Qué extraño animal había encontrado? ¿Y qué tenía que ver con ello su vaca Daisy?
Algunos misterios eran demasiado grandes para ignorarlos. Necesitaba saber más. Pero, ¿podría afrontar las consecuencias?