Momentos inapropiados captados por la cámara de un dron

La comunidad respira aliviada, celebrando el regreso a salvo de la vagabunda. El dron, un improbable ángel de la guarda, la guió de vuelta a los brazos de su agradecida familia. Este reencuentro fue un conmovedor recordatorio de lo bueno que se deriva de una sociedad vigilante y solidaria.

Y escucha esto, en cuestión de minutos, lo tenían. Lo que demuestra que no se puede ser más listo que la ley, especialmente cuando tienen drones de su lado. Así que un consejo: antes de intentar escabullirte, recuerda que las cámaras pueden estar vigilando. Una versión moderna de «las paredes tienen ojos», ¿no crees?