Cogió un destornillador fino y robusto y lo introdujo con cuidado en la pequeña costura de la caja, tal y como John le había enseñado. Con dedos temblorosos, la abrió, anticipando la gran revelación. Lo que no sabía era que el contenido de esta caja misteriosa estaba a punto de cambiar todo lo que ella sabía que era verdad.
A Dalila se le cortó la respiración cuando abrió la tapa y miró dentro. Lo que encontró fue una fotografía. Su corazón dio un vuelco al contemplar la imagen. Era una foto de John, tomada hace unos años, delante de la Torre Eiffel.