Un hombre lleva en coche a una chica que hace autostop – Al día siguiente, las noticias revelan lo inimaginable

Jacob aparcó el coche a poca distancia y se acercó a la estación con precaución, con todos los sentidos en alerta máxima. El aire estaba cargado del aroma terroso de la tierra húmeda y los pinos, y el silencio sólo se veía interrumpido por el susurro ocasional de las hojas.

Aunque Lena no aparecía por ninguna parte, Jacob estaba seguro de que tenía que estar cerca; el billete le había conducido hasta allí por alguna razón. Mientras escudriñaba los alrededores, su mirada se posó en un estrecho sendero que se adentraba en el bosque.