Siguió a un lobo al bosque. Lo que encontró le cambió la vida

El pánico empezó a apoderarse de ella. Daniella escudriñó los árboles con la esperanza de vislumbrar la figura familiar de Suzy, pero no vio nada. «¡Suzy!», volvió a gritar, esta vez más fuerte. Su voz pareció desvanecerse en la inmensidad del bosque.

Mientras Daniella buscaba a Suzy, no se daba cuenta de cómo se alejaba del sendero. Cada paso parecía adentrarla más en el bosque, los árboles a su alrededor se hacían más densos. Su respiración se aceleró al darse cuenta de lo lejos que se había alejado del sendero.