Un hombre pensó que había encontrado un cachorro en el bosque – Cuando la veterinaria los ve llama a la policía

Acercó la bolsa y se le retorció el estómago. Una mancha carmesí. No quería pensar en lo que podría haberla causado. El pulso le latía con fuerza en los oídos. ¿Qué había ocurrido aquí? Su mente barajó varias posibilidades, ninguna de ellas buena. Volvió a mirar al débil cachorro y luego a la bolsa abandonada. Alguien había estado aquí. Pero ¿dónde estaba ahora?

Un escalofrío recorrió la espalda de Daniel. Pensó en llamar a la policía y denunciar lo que había encontrado, pero la respiración agitada del cachorro dejó clara su decisión. Necesitaba atención médica, y rápido. Envolvió con cuidado el pequeño cuerpo en su chaqueta de franela, asegurándolo contra su pecho.