Con una última mirada a los árboles, Claire salió en busca del sendero. Tenía que encontrarlo antes de que se acabara la luz del día. Le preocupaba que cuando cayera la noche no pudiera encontrar el camino de vuelta.
Claire dio unos pasos antes de detenerse. La trampa no había sido al azar. Alguien la había colocado, y ese alguien aún podía estar cerca.