Vierte el café frío en una bandeja de hielo y congélalo. Estos cubitos de hielo de café mantienen tu café helado robusto y delicioso, sin la decepción acuosa. Es un cambio radical para los amantes del café: ¡tu café helado te lo agradecerá!
Sólo tienes que cortar la tapa de una botella de plástico, deslizar la bolsa a través de ella y volver a enroscar la tapa. Este sellador de bricolaje es fiable, fácil y garantiza que tus alimentos se mantengan frescos durante más tiempo. Olvídate de las escurridizas gomas elásticas: ¡con este truco para tapar botellas tienes todo cubierto!