La diversión no acaba aquí. El dormitorio cuenta con literas que son perfectas para dormir fuera de casa y jugar. Con su colorida decoración y sus elementos lúdicos, esta casa es un sueño hecho realidad para los niños. Si queréis ser los padres más impresionantes del barrio, no tenéis más que mirar a esta gente, porque están poniendo el listón muy alto y ganándose los corazones a lo grande
En el interior, las sorpresas continúan. Lo torcido del edificio no entorpece la experiencia de compra, sino que añade un elemento de diversión y asombro. El interior es un laberinto de pasillos extravagantes y giros inesperados, que hacen de cada visita un viaje encantador. Tanto si viene a comprar, a cenar o simplemente a empaparse del capricho, este centro comercial promete una experiencia inolvidable que desafía las normas arquitectónicas de la forma más encantadora.