Un gato callejero no para de traer objetos extraños a casa y su dueño encuentra un mensaje oculto

Hasta que no dejó a Orión en el suelo, Eliza no reparó en el trozo de papel andrajoso que tenía a su lado. Húmedo y arrugado, tenía una letra arañosa. Entrecerró los ojos al ver las letras irregulares garabateadas en la página: «SE ACERCA EL FIN DEL MUNDO» Se le heló la sangre. La nota también hacía referencia a buscar refugio «bajo el suelo»

No tenía ni idea de cómo Orión había encontrado algo así, ni por qué hablaba con tanta urgencia. El miedo le retorció el estómago ante la idea de que una advertencia del día del juicio final apareciera en su pasillo, junto con los inquietantes objetos que ya había descubierto.