Se trata de un juego fascinante entre psicología y fisiología. Este cambio de postura subconsciente es como una pista oculta, susurrando sus sentimientos secretos hacia ti. Genial, ¿verdad?
Si tu nombre aparece una y otra vez en su mente ebria, es muy probable que estés ocupando un lugar importante en su corazón. No es una garantía, pero esos mensajes borrosos son como pequeñas notas de amor de su subconsciente, insinuando algo más profundo que un simple «¡eh, vamos a comer pizza!» ¡Salud!