La expectación se rompió cuando el Dr. Hanson le dio la noticia. En contra de lo que ella esperaba, era casi un milagro. Cammie se había recuperado; los cuerpos extraños habían sido extraídos con éxito de su estómago. Un torrente de alivio inundó a Cassandra y su corazón palpitó de júbilo. Tras expresar su más profunda gratitud al Dr. Hanson, quedó en ir a buscar a Cammie con las primeras luces del día.
Al terminar la llamada, la invadió una oleada de cansancio. La agitación emocional que había experimentado era similar a la de una montaña rusa, pero en aquel momento reinaba una reconfortante sensación de tranquilidad. Al menos por ahora, todo parecía encajar.