Una familia adopta a una niña de cinco años, pero cuando aprende a hablar inglés, ¡descubren una horrible verdad!

Natalie y Adam Smith, mejores amigos desde la infancia, tenían un vínculo que parecía irrompible. Su historia de amor era de cuento de hadas, con una acogedora casa de dos plantas en un pintoresco suburbio.

Los Smith tenían todo lo que se puede soñar: las rutinarias barbacoas con los amigos, las tranquilas tardes viendo películas y una familia encantadora que vivía cerca. Sin embargo, bajo la superficie de su vida perfecta, yacía una profunda y tácita tristeza.