La limpieza de la ducha nunca ha sido tan efectiva
Si hay algo que necesita atención constante, esa es la limpieza de la ducha. Hagas lo que hagas y cuán bien la cuides, pronto estará sucia y resbalosa.
La razón es que hay muchos productos que caen en el piso. El shampoo, el acondicionador, jabones, suciedad, todo se queda ahí, ya que rara vez enjuagamos realmente el piso después de usar los productos. La ducha queda resbalosa y se va formando una capa de mugre que parece difícil de quitar.
A nadie le encanta tener que arrodillarse en el piso del baño a restregar la capa de suciedad que se ha formado. Por eso queremos enseñarte un fantástico truco que hará que tu ducha este reluciente sin mayores esfuerzos.
¡No hay nada que funcione tan bien como este truco de »Limpiar mi espacio’!
Esto es lo que necesitas:
- limpiador de azulejos para baño (o jabón neutro)
- una esponja de dos lados (que no raya)
- paño de microfibra
- bicarbonato de sodio
- vinagre para limpiar las puertas
¿Qué tienes que hacer?
En primer lugar, debes sacar todos sus artículos de la ducha. Quita la cortina de la ducha también (si tienes). Ahora rocía el limpiador de azulejos del baño sobre las baldosas en la ducha. Déjalo actuar durante unos 5 minutos. Frota bien todas las paredes con la esponja en el sentido de las agujas del reloj. Para todas las superficies que no están hechas de vidrio, puede poner un poco de bicarbonato de sodio en tu esponja. Esto respalda el efecto del limpiador. Pero ten cuidado: una cucharadita de bicarbonato de sodio en tu esponja es suficiente.
Si también tienes una bañera en el baño, puedes aplicar el mismo procedimiento que se describe aquí. Enjuaga todo en el sentido de las agujas del reloj con un poco de agua tibia. Ahora juagalo y limpia todo con un paño de microfibra nuevamente. ¿Eso suena tan normal?
¡Lee más instrucciones en la página siguiente!
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