- Miel
¡No cometas el error de guardar la miel en la nevera! La temperatura fría puede hacer que se cristalice y se vuelva espesa y difícil de usar. En vez de eso, almacénala a una temperatura ambiente fresca para preservar su sabor y textura. La temperatura fría también puede hacer que la miel pierda su aroma y sabor natural, por lo que es mejor mantenerla alejada de la nevera.
Y no lo olvides: almacenar miel en el refrigerador puede hacer que capte otros olores fuertes, así que asegúrate de guardarla en un recipiente sellado para proteger su sabor. ¡Mantenla a temperatura ambiente para obtener el mejor sabor y textura!